Los rituales en el duelo perinatal: la importancia de las despedidas

Desde la prehistoria, las diferentes culturas han sentido la necesidad de realizar ritos funerarios cuando fallecían sus allegados. Podríamos decir por tanto, que es algo inherente al ser humano. Sin embargo, respecto a los bebés fallecidos intraútero o al nacer, estos rituales no están casi presentes a lo largo de la historia.

Sabemos que la muerte perinatal es una realidad que en la actualidad está comenzando a ser visibilizada, pero que durante siglos ha sido silenciada y la expresión de su dolor incluso censurada.

¿Por qué son importantes los ritos ante la muerte perinatal?

Los ritos funerarios son muy importantes porque facilitan ir aceptando e integrando la realidad de la pérdida.

Este es un aspecto vital en el duelo perinatal ya que no se han tenido vivencias con el bebé fuera del vientre materno, y muchas veces ni siquiera se ha visto el cuerpo tras el parto. De ahí la recomendación de ver al bebé tras el parto, sostenerlo y despedirse de él.

En cierto modo, el rito es una experiencia que marca el inicio del duelo tras el cual habrá que ir asumiendo la vida sin el bebé que se esperaba.

Facilita el proceso de ir asumiendo no solo racionalmente, si no también a nivel emocional que el bebé no va a volver y tampoco el futuro imaginado junto a él.

También ayuda a comenzar a transitar los sentimientos de tristeza, rabia, impotencia, amor o culpa.

Otro aspecto fundamental es poder compartir con los demás la experiencia, se visibiliza, se valida su estatus como padres, la pérdida de su hijo y la expresión del dolor ante su falta. De este modo, se obtiene el consuelo de los seres queridos de un modo explícito.

El estar acompañados también va a permitir hablar del amor por el bebé, del dolor por su pérdida, poder expresar todo esto y ser escuchado por los otros, ayuda mucho a comenzar el duelo de un modo sano.

El poder establecer un sitio concreto donde quede el recuerdo del bebé, va a ayudar a ir a “hablar” con él, llorarle. Obviamente esto se puede hacer en cualquier momento y cualquier lugar, pero de este modo se reserva un tiempo y un espacio para el encuentro íntimo y el recogimiento. Va a permitir sentir al bebé cerca aunque se sepa que realmente no está ahí.

¿Cuándo hay que hacer el rito de despedida?

No hay un momento concreto en el que haya que iniciar el rito de despedida. Esto es muy importante porque a veces si la muerte ocurre antes del tercer trimestre de gestación algunos padres deciden no recuperar el cuerpo del bebé o en determinados hospitales no ofrecen esta opción.

Otras veces la madre tras el parto tiene que quedar ingresada y no puede acudir al cementerio o a la incineración.

Cualquier momento es bueno para iniciar la despedida del bebé, por ejemplo tras el impacto de la noticia, antes del parto, los padres y fundamentalmente la madre que aún le siente dentro de su cuerpo, pueden comenzar a despedirse de él, a hablarle, a decirle lo que le querían.

Luego, una vez es alumbrado, al sostenerle en los brazos se puede continuar con esa despedida durante el tiempo que sea necesario y hacerlo en compañía de los familiares que quieran.

Hay familias que sienten que no están preparadas para hacerlo inmediatamente y prefieren postergarlo para más adelante con más calma y menos angustia. No es una tarea fácil, ya que el rito implica cerrar una etapa o avanzar y no siempre se está preparado para ello.

El ritual de despedida puede repetirse en las fechas importantes, al año de la pérdida, en la fecha en la que hubiera nacido (fecha probable de parto) o en el aniversario de esta a través de una ceremonia de conmemoración o recuerdo.

Consejos para despedirte de tu bebé

Una vez más insistimos en que no hay un modo único de hacerlo, si bien hay algunas ideas que pueden servir de ayuda, muchos padres afirman que no saben qué o cómo hacerlo.

Busca un espacio tranquilo

Buscar un espacio tranquilo y bonito, puede ser en la naturaleza, cerca de un árbol especial, cerca del mar, en algún sitio que represente algo simbólico para la familia. También puede ser en cualquier espacio interior de la casa.

La música puede ayudar

Si ayuda, también puede ponerse música.

A solas o en compañía

Se puede hacer a solas, en compañía de la pareja y demás hijos o con todas las personas que se sienta puedan acompañar.

Actos simbólicos

  • Encender una vela.
  • Enterrar una caja de recuerdos.
  • Soltar un globo.
  • Plantar un árbol o planta.
  • Dejar flores en algún sitio especial.

Elabora una caja de recuerdos

Algo que ayuda mucho, es hacer una caja de recuerdos que se puede hacer y decorar, en ella se mete la pulserita del hospital, sus huellas de manos o pies si se tienen, una mantita o la primera puesta que se había pensado para él, un chupete con su nombre.

Escribe una carta

También es bonito y reconfortante escribir una carta en la que le se diga todo lo sentido junto a él durante el embarazo, los planes que se tenían junto a él, lo mucho que le querían y que siempre estará en sus vidas.

Si hay hermanos, también es importante ofrecerles a ellos la posibilidad de que se despidan a su modo, con una carta, dibujo, dejándoles un peluche, unas flores…lo que ellos quieran o necesiten.


Sabina del Río Ripoll, Psicóloga Perinatal, directora de Calma – Centro de Psicología y Especialistas en Maternidad. Combina la atención clínica a personas que atraviesan dificultades en relación a la maternidad con la docencia de cursos especializados para profesionales que trabajan con familias y bebés. Colaboradora habitual en diferentes medios de comunicación, trabaja por la visibilización y divulgación del periodo perinatal. Escritora del libro “Ante todo mucha calma” y del artículo: “Duelo Perinatal: Haciendo visible lo invisible”.